Charlando como siempre de banalidades, bueyes perdidos, y de vez en cuando de un poco de filosofía.
La noche estaba hermosa. Alrededor había gente, pero la justa.
Mientras el me hablaba de algo me puse a observarlo.
"Es igual a Lisandro*. El bigote, el bigote garpa"
Y me puse contenta. La comparación fue inversa. Lisandro no es parecido a PP. PP es parecido a Lisandro.
Segundo punto conquistado de la noche: ahora es otro. Ya no lo reconozco en mí.
(*) Tengo una obsesión con Lisandro Aristimuño. Grave. Adolescente.
1 comentario:
JAJAJAA
no tiene un amigo parecido para presentarme?
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